
La versión 170 del Superclásico del fútbol chileno fue atípica. Producto del castigo impuesto por la segunda sala del Tribunal de Disciplina de la ANFP, el encuentro se jugó sin público, situación inédita en estos duelos. Seguramente, los que más lo lamentan son los hinchas de Colo Colo, ya que no pudieron disfrutar en la cancha del buen triunfo de su equipo ante la ‘U’ por 2-0. El ‘Cacique’ jugó mejor que su rival y se cobró revancha de la goleada sufrida en la fase regular por su archirrival. En los primeros 45 minutos, Colo Colo comenzó mejor que los azules. Primero fue Bryan Rabello el que se aproximó al arco de Johnny Herrera, pero a los 15 minutos el portero universitario no pudo hacer nada ante un zurdazo de Esteban Paredes, quien anotó el 1-0. Luego de esto, los ‘albos’ se dedicaron a manejar las acciones del partido, mientras que la ‘U’ parecía no encontrarse en la cancha y era incapaz de generarse situaciones de gol. El trámite cambió un poco producto de las expulsión de Alvaro Ormeño a los 34 minutos, lo que hizo que el cuadro de Jorge Sampaoli terminara mejor la primera mitad. El inicio del segundo tiempo fue nuevamente favorable a Colo Colo, ya que tras un buen pase de Paredes, Bryan Rabello anotó el segundo tanto del encuentro. Con este tanto, la ‘U’ adelantó las líneas y se volcó en campo rival, pero ello no significó que el actual campeón del fútbol chileno llegara con peligro sobre el arco del venezolano Renny Vega. A los 60′, el duelo se puso aún más cuesta arriba para el ‘Cacique’, ya que el árbitro Eduardo Gamboa expulsó a Esteban Paredes por una falta en contra de Charles Aranguiz. Producto de ello, el cuadro azul arriesgó y comenzó a dominar la posesión del balón, lo que no se tradujo en ocasiones claras de gol. Un remate de Ángelo Henríquez a los 87′ fue la ocasión de riesgo más importante que tuvo la ‘U’ en la segunda fracción. El pitazo final del juez Eduardo Gamboa encontró alegría y felicidad en los jugadores, cuerpo técnico e hinchas de Colo Colo, quienes tendrán una semana tranquila para preparar la revancha en el Estadio Nacional. Un escenario totalmente distinto vivirán los azules, ya que la próxima semana deben revertir dos partidos adversos que pueden marcar la gloria o la decepción de este semestre.